Las consecuencias de fumar son múltiples y afectan negativamente a la salud. Al dejar de fumar, irás notando progresivamente los siguientes beneficios:
- Recuperar el sentido del gusto y del olfato, mejorar la respiración y disminuir el cansancio.
- Disminuye la tos y tendrás menor predisposición a infecciones respiratorias.
- Mejor control de tu frecuencia cardíaca y presión arterial.
- Mejorará tu circulación sanguínea a las extremidades.
- La piel y el rostro se recuperan del envejecimiento prematuro.
- Frenar el daño pulmonar tras varios años de exposición al tabaco.
- Tres años después de haber dejado el tabaco, el riesgo de infarto de miocardio o accidente cerebrovascular del exfumador es el mismo que el de las personas que nunca han fumado (los fumadores tienen 3 veces más riesgo).
- Tras 15 años sin tabaco el riesgo de padecer cáncer de pulmón se asemeja más al de no fumadores.