El desarrollo de inhibidor es una de las complicaciones más importante que puede aparecer en los pacientes con Hemofilia. Es más frecuente en la Hemofilia A y en las variantes graves. Nuestro cuerpo reconoce como extraño el Factor VIII o el Factor IX, atacándolo y neutralizando su acción.
Los inhibidores pueden ser transitorios y desaparecer o bien ser persistentes.
El mayor riesgo de desarrollar inhibidor tiene lugar en:
- Los primeros 6 meses de tratamiento
- Tras tratamientos intensivos, tras terapia en cirugías o terapia de un sangrado durante más de 5 días seguidos.