Una dieta saludable es la piedra angular de la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
La ingesta energética debe limitarse a la cantidad de energía necesaria para conseguir un IMC (Índice de Masa Corporal) entre 20-24 Kg/m2.
En general, cuando se realiza una dieta saludable y equilibrada no son necesarios suplementos dietéticos.
Las características de una dieta saludable según las guías de prevención cardiovascular incluyen:
- Evitar ácidos grasos saturados (ej. mantequilla) y sustituirlos por ácidos grasos poliinsaturados (ej. aceite de oliva).
- Minimizar el consumo de grasas insaturadas trans (ej. lácteos no desnatados, carnes rojas grasas), evitar el consumo de grasas trans procesadas (ej. margarina, patatas fritas)
- Reduce el consumo de sal: menos de 5g diarios (una cucharadita), aunque lo ideal son menos de 3g/día
- Come mínimo 2-3 piezas de fruta al día
- Come mínimo 200mg de verdura al día (2-3 porciones)
- Come pescado 1-2 veces a la semana, al menos una vez que sea pescado azul (atún, bonito, caballa)
- 30g de frutos secos no salados al día, preferiblemente nueces
- No consumir alcohol
- Disminuir la cantidad de azúcar: evitar refrescos azucarados y el azúcar blanco