Es fundamental consultar al profesional sanitario si se presentan síntomas como sensación de que se duermen los pies, hinchazón en los dedos, decoloración azulada de los dedos de los pies, frialdad excesiva, si el vendaje se moja o si hay dolor constante en la zona posterior del tobillo. Estos pueden ser indicativos de complicaciones que requieren atención médica.