[Autor: univision]
[Fuente: univision]
La enfermedad cardíaca es la principal causa de muerte entre los estadounidenses, con índices más altos entre las comunidades latinas.
Y, aunque se hable mucho de ese tipo de afecciones, un porcentaje elevado de la población ignora completamente su significado y cuáles son los números que debe conocer.
Bien reza el dicho que “quien tiene el conocimiento, tiene el poder”; por tanto, para lograr entender cuáles son esas cifras tan importantes, la guía de un cardiólogo experto es básica. Aun si usted no habla inglés, ese no es impedimento para conseguir un buen especialista.
El Instituto Cardiovascular Hispano en Dallas lo puede conectar con un cardiólogo que hable español para que lo guíe y le explique de primera mano ¿qué números debe conocer y cómo interpretarlos?
Estas son las cifras que demuestran que hay un buen estado de salud en lo que a la enfermedad cardiaca se refiere:
- Presión arterial: debe ser de 120/80 o menos.
- Colesterol: el colesterol total debe ser inferior a 200 miligramos. Su colesterol bueno, o HDL, debe ser de aproximadamente 40 miligramos para un hombre, o 50 miligramos para una mujer. El colesterol malo, o LDL, depende de algunos factores, pero cuanto más bajo es mejor.
- El azúcar en la sangre en ayunas: debe ser inferior a 100 miligramos por decilitro.
- El índice de masa corporal: o IMC, debe ser menor de 25. La fórmula para calcularlo es kg /m2; es decir el peso en kilogramos dividido por la estatura en metros
Si sus números están dentro de los estándares saludables, es obvio que se debe tratar de mantenerlos. Pero si de lo contrario muestran que hay riesgos de sufrir de enfermedades cardiacas hay que tomar acción inmediata.
El especialista se encargará de analizar las cifras mencionadas anteriormente, los factores de riesgo y recetará un tratamiento en caso de que exista una afección que lo requiera.
Debe conocer TAMBIÉN el impacto de sus hábitos en la salud
Es sabido que no hay nada mejor que la prevención para evitar problemas de salud. Como en muchas circunstancias de la vida hay unos factores que pueden controlarse, pero otros no. Los siguientes están dentro de los factores de riesgo controlables:
Siga una dieta saludable para el corazón: consumir carbohidratos, sal, azúcares, y grasas en exceso pueden contribuir al desarrollo de enfermedades cardíacas. Edúquese acerca de la importancia del tamaño de las porciones y aprenda a seleccionar opciones más saludables.
Haga del ejercicio un hábito diario: 30 a 60 minutos al día de la actividad que más le guste, ya sea caminar, nadar o montar en bicicleta, entre otras actividades, le ayudará a tener un mejor estado físico en general.
No fume, ni tampoco esté cerca de quienes lo hacen: los productos que contienen tabaco son altamente nocivos para el sistema cardiorrespiratorio. El humo de segunda mano es tan nocivo como si usted fuera el que fumara.
Evite el alcohol o tómelo con moderación: las bebidas alcohólicas no le hacen bien al cuerpo. El exceso de alcohol puede dañar el corazón sin que se presenten síntomas. Estos aparecerán cuando la afección ya ha avanzado, es decir cuando ya se está en desventaja.
Reduzca el estrés: con el ritmo tan agitado de la vida actual es importante mantenerse calmo. Busque realizar actividades relajantes que le permitan bajar la tensión del diario vivir.
Hay también factores que no se pueden controlar como, por ejemplo, su historial familiar. Conocer los antecedentes de salud de los parientes de primer grado como abuelos, padres, tíos y hermanos, puede ayudar a monitorear y/o tratar cualquier anomalía cuanto antes.
Recuerde: conozca sus números y apóyese en los avances científicos. Un cardiólogo de habla hispana le puede ayudar a entender cómo mejorar su salud cardiovascular.
Source:https://www.univision.com/local/dallas-kuvn/como-prevenir-enfermedades-cardiacas