El objetivo de la rehabilitación incluye:

 

  • La prevención de sangrados: el mantenimiento del aparato locomotor y de una condición física adecuada favorece la autonomía e independencia de estos pacientes.
  • Tratamiento de las lesiones y sus consecuencias músculo-esqueléticas: su objetivo es devolver la función articular al estado anterior a la hemorragia. Consiste en:
    • Entrenamiento de fuerza y flexibilidad
    • Reentrenamiento propioceptivo/sensoriomotor para mejorar la sensibilidad
    • Ejercicios de equilibrio y funcionales

Los ejercicios deben comenzarse en cuanto el dolor lo permita y con previa administración de factor de la coagulación.

 

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