Los síntomas de la insuficiencia venosa y las úlceras venosas incluyen tobillos hinchados, pigmentación marrón-grisácea de la piel, eccema, atrofia blanca, dolor o sensación de pesadez en la pierna afectada, y calambres nocturnos. Estos síntomas reflejan la gravedad de la insuficiencia venosa y la necesidad de un tratamiento adecuado.